Federico Herrero a estudiantes de teatro, puntos de vista

Federico Herrero-Nicolás Francisco Herrero, encuentro internacional de profesores de teatro, conceptos.

A veces el estudiante de teatro en sus escuelas de teatro, no comprende la diferencia entre actuar e imitar...concepto inicial en conferencia, año 2013, del director de teatro: Federico Herrero en encuentro internacional de escuelas de teatro.

Si el estudiante de teatro, no comprende la diferencia, tendrá dificultades para convertir su actividad en un arte.

A continuación contenidos, desde mi punto de vista-

Federico Herrero-Nicolás Francisco Herrero, encuentro internacional de profesores de teatro, conceptos.

En los actores de la viejas escuelas de teatro, concepto del maestro de actores: Federico Herrero, la intención y la realización suelen fundirse tan completamente que la primera desaparece para el espectador.

Federico Herrero al comienzo de la conferencia, aclara que esta conferencia está ante todo dirigida a integrantes de grupos vocacionales o independientes de teatro, no a profesionales.

Actuar es una profesión, afirman los directores, y no es una cuestión de retribución, sino de actitud ante la actividad.

Federico Herrero afirma: el actor debe mantener siempre su estilo, lo personal.

Los directores y un concepto clave: aunque más no sea para que el teatro sea siempre algo especial para el actor, renunciará a todo lo teatral en su vida privada.
Empero, no renunciará al estilo, se encuentre o no en público.

A continuación los directores y lo que ellos consideran relevante: la profesión de actor siempre exige gran tensión, el actor debe aprender a relajarse, pero comprender que existe una relajación específica en al arte del actor, relajación activa.
En todo momento debe evitar la extrema tensión y la laxitud total.
La profesión del actor enfrenta dos alternativas: aislarse o depender del otro, debe evitar ambas, encontrar un término medio.

Federico Herrero opina: su profesión lo enfrentará a otra tentación más: la de compadecerse de sí mismo... Inconscientemente está clamando por compasión desde la escena, aun para los personajes más malvados. También debe resistirse a esta tentación.

La sensibilidad social es indispensable para el actor. Pero eso no reemplaza el conocimiento de las situaciones sociales. Y el conocimiento de las situaciones sociales no reemplaza el permanente estudio de las mismas. Cada personaje, cada situación, cada discurso exige nuevo estudio.
El arte de observar lo ayudará a salvar muchas dificultades.

Reglas elementales para el actor.
No levantar la voz cuando se habla de prisa; no caer en el patetismo cuando se levanta la voz.
No caracterizar a los héroes mostrándolos como incapaces de sentir miedo ante nada, ni a los cobardes como incapaces de un rasgo de valor. Las características contenidas en una palabra como héroe o cobarde son muy peligrosas, o sea construir personajes con amplitud.
Dar lugar a la evolución de los personajes.

Cuando el actor quiera conmover al espectador, debe conmoverse a sí mismo.
Los directores y algunos consejos al actor, tendencias generales que el actor debería combatir.
Buscar el centro del escenario.
Apartarse de los grupos, para quedar solo.
Aproximarse a la persona a la cual le está hablando.
Mirar constantemente a la persona con la cual dialoga.
No mirar a la persona con la cual dialoga.
Colocarse siempre en línea paralela al borde del escenario.
Levantar la voz a medida que aumenta la velocidad del discurso.
En lugar de representar una cosa después de la otra, representar una cosa a partir de la otra.
Esfumar los caracteres contradictorios de un personaje.
No investigar las intenciones del autor.
Subordinar las propias experiencias y observaciones a las presuntas intenciones del autor.

Federico Herrero, una clave. Al ensayar hay que cuidar de no levantar la voz, o exagerar en los movimientos, porque cuando uno habla en voz muy alta se oye mal a sí mismo. Además, hablar en voz alta proporciona una sensación de seguridad y al ensayar se debe investigar alternativas.
En los actores de la viejas escuelas de teatro, concepto del maestro de actores: Federico Herrero, la intención y la realización suelen fundirse tan completamente que la primera desaparece para el espectador.
Con eso logran mostrar lo natural.
Pero para nosotros, lo natural tiene la desventaja de no mostrar nada.